Mensaje espiritual del folleto belga-suizo 2020-2021
“Écoute” (Escucha)
"Escucha, Israel! El Señor nuestro Dios es el único Señor" (Deuteronomio 6,4) Es a través de estas palabras que el creyente israelita expresa su fe. En el Nuevo Testamento, Jesús toma este texto en la forma: "Amarás al Señor tu Dios" y lo vincula al Levítico "Amarás al prójimo como a ti mismo" (Levítico 19:18). Esta confesión de fe determina los ejes centrales de la vida espiritual: escuchar, amar y transmitir. podríamos decir: ver, juzgar y actuar.
Entre los cinco sentidos, el oído es el que permite la percepción de los sonidos: escuchar el llanto de los niños o el sonido de las máquinas no requiere mucha atención. Escuchar es un enfoque más exigente y puede significar entender, descubrir, observar. Admirar un paisaje es escuchar a la naturaleza. Tomar al amigo en apuros en sus brazos es un gesto de escucha. La persona sorda o con discapacidad auditiva, leyendo en los labios, se pone en una actitud de escucha.
Nuestra inteligencia y habilidades no son suficientes para juzgar o entender a una persona. La escucha cristiana y la acogida son benevolentes y pasan por el corazón. Se podría parafrasear al Principito y decir: "Sólo escuchamos con el corazón, lo esencial es inaudible para el oído".
En las Escrituras, la actitud materna de Dios hacia los hombres se caracteriza por su capacidad de escuchar. La imagen de la primera página ilustra perfectamente el tema de este año "Escucha". Con la mano levantada al oído, san Benito nos enseña que escuchar a Dios, a los demás y a uno mismo hace crecer el amor en el mundo. Nos permite aportar nuestra piedra a la construcción del Reino donde todos serán amados por lo que son.
Que descubramos en todos nuestros hermanos y hermanas la presencia de Dios!
Francis Zufferey, para el equipo belga-suizo de Vida Ascendente
(Francis Zufferey es el Asesor Espiritual de la Suiza francófona)