Noticias de Portugal
El período de pandemia que estamos viviendo ha restringido nuestra libertad, nos obliga a mantenernos alejados unos de otros, a limitar nuestros contactos sociales y comunicación con los demás y, como resultado, no han podido tener lugar las reuniones de los equipos diocesanos y las reuniones nacionales habituales: retiro (en marzo), reunión nacional (en mayo) y asamblea general (en septiembre).
A pesar de este aislamiento, nos hemos mantenido en contacto con los coordinadores diocesanos, por correo electrónico y por teléfono, para asegurarles nuestra amistad y unión con los diferentes equipos, en la oración y la lectura de los Evangelios. Para cultivar esta espiritualidad, publicamos textos para los ancianos, del Papa Francisco, del cardenal D. José Tolentino y otros.
El 1 de octubre, para conmemorar el día internacional de los ancianos y los Movimientos de Vida Ascendente, nos reunimos para una reflexión sobre el libro de D. José Tolentino "¿Cuál es el amor de un país, el poder de la esperanza”.
De esta reflexión se ha puesto de manifiesto que la pandemia es un buen momento para ser más humano y solidario, para recuperar el sentido de la vida y para reflexionar sobre cómo será nuestra vida después de la pandemia.
En respuesta a esta pregunta, se señaló que hay dos axiomas en las Ciencias Humanas: el primero, el axioma de Quarenteli, un sociólogo norteamericano, especializado en el estudio de la respuesta a los desastres, que concluye que los desastres generan más cooperación que conflicto, que los pueblos como nunca antes, democratizan la vida social y fortalecen esta identidad común.
El segundo axioma, de Cyrulnik, un neuropsiquiatra francés, dice que el trauma causado por la pandemia no es irreversible, pero que es reparable como sucede con los materiales metálicos resistentes (capacidad del material para soportar los golpes sin ser roto), que nosotros, los seres humanos una vez heridos, no perdemos total confianza en la vida, pero somos capaces de recuperar y pasar a una nueva etapa de la vida.
En resumen, las pandemias generan más cooperación que conflictos, unen a las personas más que nunca y fortalecen la identidad común.
Con el fin de profundizar nuestra vida espiritual en la época navideña y superar la soledad, planeamos reunirnos el 19 de diciembre para una reflexión sobre el Adviento.
Les deseamos una Feliz Navidad y esperamos que la pandemia se supere en el nuevo año 2021.
El Presidente de Vida Ascendente Portugal
Leonardo Antão