La ancianidad: riqueza de frutos y bendiciones
En enero del año 2020 el Papa Francisco convocó el primer congreso de la Pastoral de las personas mayores, con el nombre La Riqueza de los años, en el que ponía de manifiesto la necesidad de que la iglesia dispusiera de una pastoral que atendiera las necesidades específicas de los mayores.
En España el pasado día 24 de mayo se ha presentado el documento que da comienzo a la Pastoral de las personas mayores, con el título que encabeza este artículo, La ancianidad: riqueza de frutos y bendiciones.
La pandemia ha castigado con especial dureza a los mayores y ha puesto énfasis en la necesidad de poner en marcha una pastoral enfocada a atender las necesidades específicas del colectivo de personas mayores.
Con este paso de disponer del documento que orienta la pastoral de las personas mayores da comienzo la puesta en marcha de esta pastoral, es necesario que todos nos sintamos implicados en su desarrollo. Somos muchos los mayores que podemos y debemos ser parte activa; cuando nuestro movimiento nació las personas que dieron los primeros pasos, se preguntaban ¿Qué puedo hacer yo por la iglesia, a mi edad y con mis limitaciones? Y la respuesta a esta búsqueda fue: atender a los mayores en la iglesia y esto dio como fruto lo que ahora somos. En estos momentos nos hacemos la misma pregunta y parece que la respuesta sigue siendo la misma: trabajar con, por y para los mayores, y en España le damos gracias a Dios por que ha puesto en nuestras manos una herramienta extraordinaria como es la Pastoral de los Mayores.
Álvaro Medina
Presidente de Vida Ascendente España